El mejillón Gallego fue el primer marisco en tener un sello de calidad. Esto se debe al color tan característico que presenta y lo más importante, posee una carne de alta calidad que apenas disminuye su tamaño al cocerse.
Se calcula 1 Kg de mejillones gallegos frescos para 3-4 personas.
Conservación y preparación del mejillón gallego
Lo puedes preparar tras cocer al vapor con un fondo de agua de mar y laurel, lo que favorece la apertura del mejillón. Su carne suave y jugosa nos permite combinarla con otros ingredientes, como en la fideuá, o con champiñones, rellenos de bechamel y empanados, y múltiples recetas más. La versatilidad del mejillón le permite figurar a la vez en preparaciones sencillas y en la alta cocina.
El mejillón gallego debe consumirse lo antes posible. En la nevera, aguantan 2 días envueltos en un trapo mojado de agua con sal para que sigan vivos. También puedes cocinarlos y, una vez fríos, guardarlos en el frigorífico en la bandeja más alejada del congelador.
Respecto al aporte nutricional del mejillón gallego, si se consume con moderación, te aporta minerales en porcentaje mayor que otras carnes, además de un bajo contenido calórico y vitaminas del grupo B.